#ElPerúQueQueremos

FOTO DE EL COMERCIO

¿La izquierda volvió a fracasar?

Un análisis a los votos prestados de los anti-sistema y a-políticos peruanos

"La gente que ha votado por Frente Amplio en estas tres últimas semanas, en su mayoría, no comparte los ideales del partido".

Marco Sausa

Publicado: 2016-04-12

Ha terminado la primera fase del proceso electoral peruano, dejando un evidente triunfo de Keiko Fujimori y Pedro Pablo kuczynski. Un poco más calmados, luego del fulgor de las elecciones, algunos simpatizantes de Veronika Mendoza, la brillante representante de Frente Amplio en estas elecciones, se han aventurado a proclamar el triunfo de la izquierda como reaparición política en el Perú. Lo cierto es que si bien las agrupaciones que conforman el Frente Amplio han logrado un cierto grado de formalización e institucionalización del partido, las reformas ideológicas de fondo aún distan mucho de un real proceso de modernización y que supone en cierta medida una de las causas por las que FA no pudo entrar a la segunda vuelta.


Ahora bien, el apoyo recibido a FA en esta elecciones y según el análisis de expertos son gracias a dos factores trascendentes; el primero, la salida de los candidatos punteros Julio Guzmán y  César Acuña, este fenómeno que fue originado por el JNE al tacharlos y expulsarlos respectivamente, re-configura el panorama político de la primera vuelta, los votantes que buscaban nuevas figuras sin importar la procedencia política de los candidatos (a-políticos) y los votantes anti-sistema que no necesariamente buscan un cambio constitucional o de modelo económico sino que están en contra del desempeño del estado y su nula presencia en esas zonas, es decir no están en desacuerdo del libre mercado, sino más bien están en desacuerdo con las políticas sociales que en gran medida no les han permitido entrar al modelo o simplemente no los han ayudado de salir de la pobreza (básicamente el sur del país); por ejemplo, en Puno o Cuzco donde existe una gran informalidad a todo nivel tanto laboral como empresarial, la gente no pide que intervenga el estado a nivel económico, sino más bien a un nivel social, ya que la gran parte de la población no está dentro del sistema, trabaja de manera informal y por ende no puede acceder a los servicios básicos, de otro lado, no quieren que el estado les cobre impuestos o administre su dinero (medidas meramente liberales). Julio Guzmán y César Acuña representaban hasta antes de su salida de la contienda electoral casi un 30% de votos y tenían una fuerte presencia en el sur, finalmente fueron repartidos, en diferente medida entre los candidatos punteros que hoy conocemos a solo tres semanas de las elecciones, hasta antes de eso, FA simplemente no aparecía ni entre los cinco favoritos.

 

FOTO DE CRÓNICA VIVA

Con esto quiero decir que el voto que apoyó, luego del retiro de estos candidatos a Veronika Mendoza no es necesariamente de una izquierdista por convicción y tampoco es meramente anti-sistema, es decir los votantes que los apoyaron, en su mayoría, no comparten ideológicamente, ni programáticamente su plan de gobierno, sino que fue una respuesta a las necesidades que los tres últimos gobiernos les han dejado y no han ayudado a resolver y ese es el segundo factor de apoyo a FA; la postergación de los últimos gobiernos de toda la zona sur del país. Definitivamente es innegable la falta de presencia del estado a todo nivel para mitigar la pobreza en esa zona del país, tanto del gobierno central como de los gobiernos regionales, ninguno ha puesto interés por una real reforma que haga que estas personas puedan beneficiarse a nivel social y económico de lo conseguido hasta el momento. 

Las necesidades del norte son totalmente diferentes a las del sur, mientras el norte pide seguridad, el sur pide lucha contra pobreza, agua y luz, necesidades que ya han logrado superar muchas de las zonas del norte y centro del país. 

Por lo que la gente que ha votado por Frente Amplio en estas tres últimas semanas, en su mayoría, no comparte los ideales del partido. Si hace tres semanas fue Todos por el Perú, hoy es Frente Amplio, mañana puede ser el APRA o algún partido que logre canalizar los votos de los anti-sistema y a-políticos del Perú, en esa medida entonces, los votos que consiguió FA en estas elecciones son votos prestados de ese bolsón de votantes del sur. No estoy diciendo que el trabajo realizado por las bases no haya sido buena, todo lo contrario creo firmemente que el trabajo de los militantes de FA para canalizar y establecer sus estrategias ha sido; sin lugar a duda, bastante bueno, lo que quiero decir es que FA no tiene un voto duro, un voto ideológico, un voto como el fujimorista o el aprista que a pesar de las denuncias, corrupción y errores va a seguir latente. Lo que a primado en el voto de FA ha sido un voto ANTI, anti Keiko, anti sistema, anti estado, etc. Lo que a corto plazo puede ser beneficioso para conseguir algunos curules en el congreso, pero a largo plazo no le garantiza su permanencia en la política, ya que es un voto emocional en gran medida de corta duración.


FOTO DE REPORTEROS EN LINEA


¿Cuál es el siguiente paso y el reto para la izquierda?

El principal reto es mantenerse unido, la gran cantidad de agrupaciones de izquierda va a poner a prueba el liderazgo de Veronika y a sus seguidores; sin ir muy lejos, el nacionalismo, a pesar de tener casi 30 curules se desfragmentó a los pocos años, si eso vuelve a ocurrir de nuevo la izquierda seguirá retrasando su labor fiscalizadora en el ámbito político del país. Se debe seguir agrupando a otras listas que comulguen la misma linea ideológica. No se puede repetir un Cajamarca con Gregorio Santos en nuevos comicios, literalmente le robó las elecciones a Veronika. Lo que se debe de hacer es virar de un voto "anti" o un voto emocional a un voto objetivo o un voto ideológico, sin duda una tarea bastante difícil para este nuevo partido, Keiko lo logró luego de seis años ¿cuánto tardará la izquierda?

Por otro lado, el siguiente paso de la izquierda peruana es la de una real modernización ideológica del partido. Acusaciones reales o no, FA en su conjunto demostró en estas elecciones ser un partido de medidas radicales, algo que a Humala en la primera vuelta del 2006 no le jugó a su favor en la segunda vuelta, en este caso, FA volvió a cometer el mismo error. El hablar de cambio de modelo económico y cambio de constitución, le puso los pelos de punta a muchos y no viró a hacia un centro como sí lo hizo PPK en su momento, la diferencia es que PPK viró de una derecha hacia el centro y Veronika se quedó, en mi opinión, erróneamente en la izquierda más radical, encendiendo más las acusaciones de chavista y comunista. Hay que tener en cuenta que hoy por hoy los votantes deciden más objetivamente por quién votar. Yo creo que si FA hubiera moderado su discurso anti economía de mercado, anti TLC, anti inversión extranjera-capitalista y hubiera enfocado su discurso hacia reformas sociales, democráticas y progresistas, es decir a trabajar sobre lo construido, a no perder el tiempo en política normativa y todas estas parafernalias que no agregan valor a la vida de la gente. Si FA hubiera entendido el mensaje de los peruanos que apoyaban a Keiko con un aplastante 40% en las encuestas, no solo como un apoyo al trabajo de su padre sino como un apoyo a lo logrado con su modelo hasta el momento, muchos votantes hubieran apoyado su candidatura y los resultados hubieran sido diferentes. Con esto no digo que FA deba apoyar a Keiko o su modelo, digo que debieron proponer cambios y no un borrón y cuenta nueva.


FOTO DE TRUJILLO INFORMADO


Sin duda, la izquierda comienza un nuevo capítulo en su historia, ningún modelo es perfecto y lo único perfecto es el cambio. Las normas cambian y se modernizan de acuerdo a las necesidades de las sociedades y hoy por hoy de acuerdo a la globalización también. No se puede ser un país de espalda al mundo. La izquierda no ha vuelto a fracasar, pero tampoco ha triunfado eso lo dirán los años, su desempeño en el congreso y su desempeño a nivel partidario. Digamos que se ha puesto en vitrina. No se puede concebir un país sin una balanza social, incluyendo la derecha la necesitan para hacer un Perú que a pesar de las diferencias ideológicas, podamos convivir y usar nuestras ideas para mejorar la vida de los más pobres y necesitados. 


Escrito por

Marco Sausa

Soy licenciado en Administración de Empresas de la Universidad de Lima. Escritor, emprendedor, viajero y vivo en los Estados Unidos.


Publicado en

MARCO EMPRESARIAL

Comentarios y Análisis políticos - económicos desde una perspectiva empresarial.